Tiene que haber una vida de fe y reconocer nuestra necesidad de Dios y de reconciliarnos con nuestro Padre celestial.
Un corazón muerto por el pecado no puede manifestar vida, porque la vida solo la da Cristo. La fe verdadera si no es vivida, no sirve de nada. «Entonces Jesús dijo al centurión: Vé, y como creíste, te sea hecho. Y su criado fue sanado en aquella misma hora» (Mateo 8:13 )
Other Sermons In This Series

Pentecostés en tu vida
junio 05, 2022

Quién como Él
junio 12, 2022

Invitación de boda
abril 25, 2021
